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Causas del problema

Baja calidad educativa escolar

Por Alberto Cancino Correa

Uno de los primeros países que ha sorprendido con una mejora sorprendente en su calidad educativa es Finlandia el cual ha sido medida por primera vez en el programa de evaluación internacional estudiantil ( PISA, por sus siglas en inglés) que se realizó en el año 2000 donde mostró  el efecto de las profundas reformas que comenzó a realizar desde hace 30 años en el sistema educativo. Obtuvo, para ese año, donde compitió con 43 países participantes, el primer lugar en el rubro de lectura, el cuarto puesto en matemáticas y tercero en ciencias. Para el 2003,  logró el primer puesto en las materias antes expuestas y el segundo en resolución de problemas. Sin embargo, Perú participó en  PISA PLUS que se realizó en el 2001 donde obtuvo los último puestos en todas las áreas por lo que dejó de participar en las siguientes ediciones hasta el 2009 donde pasó por una situación similar (Fasce,2004). En las siguientes líneas se expondrán dos de las posibles causas de la baja calidad educativa escolar.

Una de las posibles causas fundamentales de la baja calidad  del sistema educativo escolar es la deficiente formación que poseen los profesores de estas instituciones. En otras palabras, los sistemas educativos  con mejores resultados en las pruebas han consensuado que la mejor manera de obtener  un impacto positivo se logra al mejorar la instrucción (Barber, 2008). Según una encuenta realizada por  IPSOS en el CADE Universitario 2017, de un total de 336 entrevistados,  86 de ellos  considera que unos de los temas más importantes que debe observar el sector público para el desarrollo económico y social del Perú es mejorar la calidad de la educación. Además, de la misma cantidad de entrevistados, 73 de ellos considera que para lograr un crecimiento económico y sostenido en el tiempo se debe solucionar la educación de baja calidad. También, existe una correlación negativa entre una atención en la educación y los crímenes. Una baja calidad educativa , disminuye el promedio de sueldos por lo que también disminuye el costo de oportunidad  de realizar crímenes y tiende a aumentar la actividad criminal después de la escuela. Esta mejora en el sueldo promedio aumenta el costo de oportunidad de dos maneras. Primero, realizar los crímenes requiere tiempo para organizarlo, aquel que no podrá ser usado puesto que estará  consumido por propósitos más productivos. Segundo,  si se comete un crimen, este será sancionado con  un largo periodo de encarcelamiento que es más costoso que mejores salarios y oportunidades que en el mercado laboral (Lochner. 2007).

 Otra de las causas es la mala gestión de los recursos otorgados por el estado. Según el BCRP, en su informe “una medida de la eficiencia del gasto público en educación”, se observa que  en Perú , para el año de 1980 a 1985, se gastó 44 dólares por alumno el cual es menos que los países de américa del sur y américa central. Este, a lo largo de tiempo, ha venido en aumento; sin embargo, no se obtuvieron los resultados esperados. Además, un estudio realizado por el Ministerio Nacional de Educación en el 2014, 16% de las escuelas en lima tiene problemas de acceso a saneamiento y un 13% tienes problemas de acceso de agua.

 En conclusión, el alto nivel de crimen en las zonas de Lima y Callao se debe a una baja calidad educativa escolar que está ligada a una deficiente formación de los maestros y una mala gestión de los recursos otorgados por lo que para disminuirlo se debe mejorar el sistema educativo del país mediante una mejora en la formación de los maestros que son el principal pilar para  los países desarrollados que tienen excelentes resultados en las pruebas y además gestionar correctamente el presupuesto que recibe la institución del estado,  primero, invirtiendo más y de manera eficiente en el alumno, y mejorando la infraestructura de colegios en Lima y Callao.

Situaciones como la que se   muestra en esta imagen abundan en el Perú. Hay pocos recursos para las instituciones educativas más alejadas del país y es lamentable que las autoridades se preocupen poco por esta problemática.

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Consumo adictivo del alcohol y las drogas

Por Gianni Bejarano Ríos

Actualmente en Lima, el mercado del alcohol es totalmente legal para las personas adultas. El Gobierno espera de la sociedad un consumo controlado y no excesivo, ya que este tiene diversas consecuencias en el cuerpo humano; sin embargo, se consume el alcohol de manera excesiva y sin ningún control. Además existen productores y vendedores de drogas. Según el estudio denominado “Epidemiología de Drogas en la Población Urbana Peruana 2017”, realizado por el Centro de Información y Educación para la prevención del abuso de drogas(CEDRO)  publicado el día 17 de julio de 2017 entre 8,424 residentes de 13 ciudades de la costa, sierra y selva del país, evidenció que en el Perú la droga ilegal más consumida es la marihuana, seguida por el PBC y el clorhidrato de cocaína, y en menor cantidad otras drogas como el éxtasis. A continuación, se explicarán los principales factores políticos y sociales que afectan a la población en situación de alcoholismo y consumo de drogas en Lima.

Los escasos conocimientos de las consecuencias del consumo adictivo afecta a los habitantes de la ciudad de Lima. Esto se debe a que pocas personas no se informan de lo que consumen y sus consecuencia, según el informe publicado en la revista Salud mental realizado por sicólogo Enrique Macher Ostolaza especialista en criminología publicado el 20 de julio del 2010, el 97% de los casos reportados de violencia domestica se asocia a hombres alcohólicos. Las situaciones que representan estos casos son de problemas frecuentes y violentos del padre hacia la mujer  y los hijos. Estas agresiones se dan frecuentemente cuando el padre se encuentra en estado de ebriedad. Estos episodios de violencia llegan a generar secuelas en los hijos. Esto contribuye a que los hijos la normalicen en su entorno. A parte de ello, al no tener afecto de los padres, llegan a buscar refugio en grupos con dinámicas  delincuenciales. Esto se relaciona como un problema de inseguridad ciudadana por el consumo adictivo del alcohol, ya que esta genera una conducta agresiva y causan inseguridad para las personas que están cerca al entorno.  

Además, el fácil acceso al alcohol y las drogas provoca que el consumidor adquiera el producto de manera frecuente y desmesurada. Hoy en día encontramos en la ciudad de Lima más puntos de ventas en las cuales se pueden adquirir drogas legales e ilegales, a pesar de que  está prohibida la venta de estas últimas. Sin embargo, en la mayoría de los casos las personas son presionadas al consumo por su entorno social, ya que, algunas drogas son adquiridas por jóvenes y adultos de manera ilegal y se llega a consumir de manera excesiva, porque buscan llegar a satisfacer sus necesidades de consumo. Un ejemplo claro de esto lo propone Harvey Milkman, psicólogo profesional, en su tesis doctoral concluía que las personas elegían la heroína o las anfetaminas dependiendo de cómo quisiesen lidiar con el estrés. Los consumidores de heroína preferían insensibilizarse, mientras que los que tomaban anfetaminas preferían enfrentarse a él activamente.  Esto beneficia de manera directa a las personas  que habilitan su venta, lo cual genera  un gran margen de ganancias vendiendo estos estimulantes, más allá de sus consecuencias. Esta problemática esta relacionada con la inseguridad ciudadana ya que las personas, al no tener dinero, llegan a robar para satisfacer su consumo.

En conclusión, el problema de la inseguridad ciudadana se puede explicar por el consumo adictivo de las drogas. Esto es generado  por un mal control en el mercado por parte de las autoridades y por las personas que venden estos productos para beneficio suyo. La labor de los comerciantes es ofrecer a las personas productos para mejorar su estilo de vida y ayudar a la salud pública. Sin embargo, también es importante recordar que, por parte del ciudadano, es necesario informarse de una mejor manera de las consecuencias que traen estos productos al consumirlos de manera adictiva sin ningún control. Para contrarrestar este problema se debería ejecutar una mejor labor de fiscalización para detener la venta. Además, es fundamental aplicar una mayor sanción para los vendedores.

En la imagen, se observa a una mujer asustada por un hombre el cual tiene una actitud violenta por el consumo de alcohol.

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Bajos recursos económicos

Por Christian Ricra Acuña

Actualmente, en Lima, se encuentran muchas familias que padecen  de bajos recursos económicos. Para entender mejor  su concepto, estos son los medios abstractos o concretos que permiten (a una familia, empresa, etc.) satisfacer ciertas necesidades dentro de un ámbito comercial o productivo. Si bien existen múltiples factores de la pobreza, el que más destaca es la desigualdad social. Hay una conexión irremediable entre pobreza y desigualdad: ciertas dimensiones de desigualdad llevarían a que las personas se encuentren por debajo de los niveles mínimos aceptables de esa sociedad.

El número de personas que carecen de lo básico a nivel mundial son de 702 millones, lo que representa el 9.6% de la población en el mundo, según el informe del 'Global Monitoring Report'. El 21,7% de la población peruana sufre de pobreza, según el Instituto Nacional de Informática (INEI Según el investigador principal de ‘Grade’, Hugo Ñopo, para el Perú se ha vuelto más difícil combatir la pobreza urbana que la rural, debido a que la dinámica del PBI contagia más y dificulta la focalización. La causa de la alza de la tasa de pobreza fue la mala gestión del gobierno en los últimos meses ya que no tuvieron planes eficientes contra esta problemática y no se enfocaron en las zonas más alejadas del Perú, donde las familias se encuentran lejos de la sociedad y donde al parecer el gobierno no los tiene en cuenta. En consecuencia, hubo un aumento de desempleo. Por ello, la mitad de la población en el Perú está bajo la línea del subempleo y el desempleo. Esto causa que ciertas personas tomen el mal camino de convertirse en delincuentes para así sobrevivir.

Una forma de aproximarnos a las carencias de los hogares es mediante las necesidades básicas insatisfechas (NBI) que puedan presentar los mismos. En el contexto dinámico de la pobreza, las NBI nos pueden dar un contexto de los estados rezagados de los hogares en cuanto a su bienestar. Ellas incluyen elementos de la historia social de los hogares como dificultades estructurales para satisfacer ciertos requerimientos, factores culturales, etc. que podrían estar mostrando barreras dentro del hogar para mejorar su situación y que sería difícilmente reflejada en la medición única bajo la metodología de la línea de pobreza. Asimismo, es razonable plantear la utilización de las NBI como una herramienta de caracterización de la pobreza, complementando las mediciones realizadas a partir de métodos indirectos como el del gasto y generando información útil para la focalización de políticas. Según  la Encuesta nacional de hogares (ENAHO), estos son los 2 NBI más frecuentes en el Perú: NBI 1.Viviendas inadecuadas: alude al material que predomina en los pisos y paredes, así también, como al tipo de vivienda. Por ello, se considera que no cumplen los requisitos mínimos de adecuación aquellas viviendas cuyo material que predomina en las paredes exteriores es estera.

NBI 2. Hogares con vivienda sin ningún servicio higiénico: este segundo NBI considera aquellos hogares en vivienda que no cuenta con ningún tipo de desagüe. Se establece que un mínimo necesario está asociado con la disponibilidad de, por lo menos, un sanitario. En ese sentido, los hogares que presenten esta necesidad insatisfecha serán aquellos que no disponen de servicio higiénico por red de tubería o pozo ciego.

En conclusión, el problema con los bajos recurso económicos puede explicarse por la falta de apoyo y pocas oportunidades de empleo. Esto ocasiona que personas decidan convertirse en delincuentes. Sin embargo, como ciudadanos, es fundamental exigir a las autoridades mayor generación de empleo y planes para poder combatir con la pobreza. Si los ciudadanos no exigimos dichas cosas, las personas más necesitadas optaran por la delincuencia como último medio para sobrevivir.

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La pobreza extrema afectó al 3,8% de la población en el 2017, cifra similar a la del 2016. Esto significa que 1,2 millones de personas persisten en esta situación. Es un hecho lamentable que no haya tantos planes para acabar con la pobreza como debe ser.

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